Este hecho es particularmente relevante cuando el intento de aparcamiento en exterior, se produce a diario. En estas circunstancias, los conductores pueden perder gasolina o gasoil por una razón que puede obviarse. Contratar una plaza fija o bien por estancias alternas, asegura a los conductores ausencia de robos y de gastos inútiles.
En cuanto a la sustracción de coches, hay que tener bien presente que en su gran mayoría se producen en zonas exteriores sin vigilancia, en especial en solares y calles por donde no pasa mucha gente. Estos son los lugares en donde suele haber aparcamiento libre, pero normalmente están alejados del destino de los conductores y, por supuesto, estos no estarán tranquilos respecto al estado de su vehículo.
En Madrid y otras capitales, decidirse por un parking privado, puede evitar el robo de coches de lujo. Este tipo de sustracciones se dan por parte de delincuentes especializados, los cuales se deshacen de la cerrajería del coche en muy poco tiempo. Por ello, y teniendo en cuenta su discreción a la hora de realizar sus actos delictivos, lo más adecuado es poner el coche a salvo en un garaje vigilado tanto por circuitos cerrados de TV como por personal que se encarga de la vigilancia in situ. De este modo, nada escapará a la vista de los especialistas en vigilar aparcamientos subterráneos.
